Corazón de San Valentín de madera reciclada

Para empezar este proyecto, he agarrado un trozo sobrante de contrachapado de un cuarto de pulgada para pegar mis trozos.

(Si no tienes por ahí contrachapado de un cuarto de pulgada, aquí tienes algunos ejemplos de lo que he utilizado en su lugar. Nunca me preocupa demasiado el aspecto de la pieza inferior, ya que los restos pintados la cubrirán).

A continuación, se cortan los trozos más pequeños al tamaño y la forma deseados. (La Moto-Saw funciona muy bien para esto). He usado secciones más pequeñas de contrachapado fino o viejos listones de la valla del jardín. Este es un buen momento para jugar con la pintura y pensar en la combinación de colores. Es mucho más fácil pintar los restos ahora, antes de pegarlos. Cuando la pintura ya está seca, desgasto algunos bordes que queden más definidos al montarlos.

En un trozo de papel se recorta un corazón y se utiliza para trazarlo en la lámina inferior de madera. (Esto sirve como guía al pegar las piezas superiores).

Después de jugar con la distribución y el patrón, se aplica el pegamento y se colocan abrazaderas o algún objeto pesado encima del conjunto para asegurarlo hasta que el pegamento se seque. (Es importante que haya un buen contacto hasta que el pegamento se seque así que, si se me acaban los objetos pesados, me tomo un descanso, vuelvo a ello cuando ya se ha fijado el adhesivo y repito el pegado/apriete).

Cuando el pegamento se haya secado del todo, se vuelve a utilizar el recorte del corazón de papel para colocarlo en las piezas superiores.

A continuación, se recorta el corazón final con la Moto-Saw, siguiendo la línea trazada. (Asegúrate de seguir las instrucciones de seguridad, configuración y funcionamiento incluidas con la Moto-Saw).

Después de recortar el corazón, puedes igualar los bordes con tu herramienta Dremel favorita, ya sea la Multi-Max o cualquier herramienta rotativa Dremel.

A continuación, se pueden rellenar los huecos entre las piezas con masilla de pintor y limpiar el exceso con un trapo húmedo.

Para terminar, se hace un agujero para la cinta o el cordel. ¡Y ahí lo tienes! Escribe un mensaje en el reverso y tendrás una gran tarjeta de San Valentín de madera reciclada.